viernes, 24 de junio de 2011

Broderskab


Broderskab (Hermandad), de Nicolo Donato, con Nicolas Bro y David Dencik.

Un desnortado joven danés recién expulsado del ejército se une a un grupo neonazi, enamorándose de uno de ellos.  El dramón está servido, pero con mucha inteligencia, elegancia y sobriedad.  Pasas un mal rato viendo las contradicciones del ser humano y lo bajo que se puede llegar a caer sin, en un principio, tener malas intenciones.  Interpretaciones acertadísimas.  Altamente recomendable.

Beastly


Beastly, de Daniel Barnz, con Vanessa Hodgens y Alex Pettyfer.

Un guapo y repelente hijo de papá recibe lo que se merece al ser mágicamente castigado a lograr que alguien le quiera después de haber sido transformado en una abominación.  A meter en el saco recién creado de adaptaciones de clásicos infantiles a los rancios tiempos cinematográficos que corren (por ahí andan Caperucita y Blancanieves).  Curiosidades: Neil Patrick Harris y Mary Kate Olsen aparecen haciendo el mongo y divirtiendo al personal, aunque no logren levantar a film tan mediocre.

Source Code


Source Code (Código fuente) de Duncan Jones, con Jake Gyllenhaal y Michelle Monaghan.

Un piloto de helicóptero del ejército USA está siendo usado en un experimento científico, reviviendo los últimos ocho minutos de la vida de un pasajero de un tren que ha sufrido un ataque terrorista, con la intención de encontrar al culpable.  La sensación de angustia y presión de este thriller lo hace altamente recomendable.  Gyllenhal escoge bien sus papeles y su nombre se ha convertido en garantía de producto de calidad.  La parte ñoña, empero, no la han podido suprimir.

V for Vendetta



V for Vendetta (V de Vendetta), de James McTeigue, con Natalie Portman y Hugo Weaving.

En un mundo regido por el miedo, surge un enmascarado justiciero que pretende despertar a la población del sopor conformista al que ha sido inducido.  Shakespeare, Cyrano, Errol Flynn... Impresionante película de ficción que bien podría ser real y por eso nos pone más, si cabe, la piel de gallina.  En tiempos como estos, ¿por qué no se repone y reivindica?

Deep in the valley


Deep in the valley (En lo más profundo del valle), de Christian Forte, con Chris Pratt y Brendan Hines.


Un par de amigos con vidas deplorables se ven transportados a un mundo paralelo que reproduce las escenas de una película porno y allí aprenderán una lección valiosa para sus vidas.  Con esa introducción, para qué decir más.  Esto es todo muy descacharrante, pero es la mejor de las tres últimas películas vistas, así que… Entre chistes guarros y zafios anda el juego, aunque de vez en cuando se vislumbra inteligencia tras esos mastuerzos protagonistas.

Dead Space. Downfall


Dead Space.  Downfall (Dead Space.  Perdición), de Chuck Patton.

Un monolito es encontrado en un planeta perdido de la mano de Dios y, mira tú por dónde, por cogerlo se libera una vida alienígena que se carga todo lo que pilla.  Anime sacado directamente de un videojuego (y van…) cuyo guión carece de todo, aunque el visionado de tripas a cascoporro gustará al aficionado al gore.  A nadie más.

7 minutos


7 minutos de Daniela Fejerman, con Marta Etura, Luis Callejo y Pilar Castro.

Historia coral sobre personas que acuden a un servicio de citas rápidas para conocer a su media naranja.  González-Sinde (sí, ella) y la propia directora son muy dadas a comedietas insulsas y sin chispa de gracia.  Firman este guión subvencionado que es para matar a hostias a más de tres.  Algunas actuaciones, empero, se aprecian.  Otra para añadir al saco de “por qué no suelo ver películas españolas”.

domingo, 19 de junio de 2011


Sucker Punch, de Zack Snyder, con Emily Browning y Vanessa Hudgens.

Una joven es fraudulentamente internada en una institución mental por su padrastro.  Le practican una lobotomía y, a parti de ahí, que quien la vea diga de qué va.  VideoTruñoJuegoMusical infumable del director de Sin City y 300.  Y las menciono para que se compare cuán truño ha llegado a fabricar.  ¿En qué estaba pensando este hombre?  ¿"Dejad de decir que soy una promesa"?  Pues lo ha conseguido.

Keinohrhasen


Keinohrhasen (Conejo sin orejas), de Til Schweiger, con Til Schweiger

Un periodista del corazón sin escrúpulos es condenado a servicios sociales en una guardería.  Truño, ¿qué más puedo decir?  Yo estoy estudiando alemán y tengo que ver cultura alemana.  Usted que puede, huya como alma que lleva el diablo en cuanto aparezcan los créditos.

Okuribito


Okuribito (Despedidas) de Yojiro Takita, con Mashahiro Motoki y Rioko Hirosue.

Un joven músico sin trabajo encuentra su sitio en el mundo al contestar a un anuncio que busca a un aprendiz de embalsamador.  Como si “Six Feet Under” la hubiesen grabado en Tokio.  Bonitas historias sobre la vida y la muerte con un fondo musical y pictórico bastante preciosista e intimista.  Los accesos de ñoñería empañan el resultado final, pero merece mucho la pena ver el proceso, grabado con toda perfección y respeto.

The lucky ones


The lucky ones (Tipos con suerte), de Neil Burger, con Tim Robbins y Rachel McAdams.

Tres soldados, de permiso por heridas, comparten coche para llegar a sus destinos y acaban compartiendo sus vidas.  Road movie sobre el descenso a los infiernos de los personajes, con historias interesantes y, a veces, divertidas.  Recomendable.  Aunque sale el Robbins, no me ha dado impresión de ser muy crítica con guerras y ejércitos.  El muchacho se reblandece o yo no lo he pillado.

Choke


Choke (Asfixia), de Clark Gregg, con Sam Rockwell y Anjelica Houston.

Un don nadie adicto al sexo añade a sus obsesiones a su madre moribunda en un sanatorio mental y a su nueva y atractiva doctora.  Estupendo cine independiente.  ¿Que cómo sé que es independiente?  Porque tiene historia y tiene personajes, chorrea inteligencia y mensaje.  Recomendada para pasar un muy buen rato.  Anécdota: el director hace de imbécil antagonista del personaje principal.

L'auberge rouge


El albergue rojo (L’auberge rouge), de Gérard Krawczyk, con Gérard Jugnot.

Una diligencia se refugia por el mal tiempo en un albergue regentado por una familia de asesinos en serie.  Superproducción francesa que no se entiende para qué la han hecho.  El despilfarro de dinero es increíble (ambientación, efectos, actores…) y el resultado deplorable.

Paul


Paul, de Gregg Motola , con Simon Pegg y Nick Frost

Unos frikis ingleses viajan al Comic-Con USA para vivir lo que creen que es la mejor experiencia de sus vidas.  Pero sus vidas les tienen preparada una sorpresa.  Y la sorpresa también se la lleva el espectador, que disfruta de los cabezahuecas de los protagonistas en una comedia gamberra y divertida con el marchamo de Working Title.

The Echo


The Echo, de Yam Laranas, con Jesse Bradford.

Un joven convicto con la condicional regresa a la casa de su difunta madre y empieza a sufrir alucinaciones.  Una de fantasmas con mala baba que en vez de lucir chica cañón que sufre sustos, luce chico cañón que sufre sustos.  Por lo demás, originalidad cero.

The barefoot Contessa


The barefoot Contessa (La Condesa Descalza), de Joseph L. Mankiewicz, con Ava Gardner y Humphrey Bogart.

Atormentada vida de una atormentada bailaora de tablao flamenco que llega a ser gran actriz de Hollywood.  Se puede entender el hechizo de la Gardner, pero el texto es de lo más pretencioso que hace tiempo escuché.  La historia tiene su curiosidad, pero cuesta digerir el envoltorio.  Actuaciones de cartón piedra para una cinta recomendada a nostálgicos.

One, Two, Three


One, two, three (Un, dos, tres), de Billy Wilder, con James Cagney.

En plena Guerra Fría, y en Berlín Occidental, un directivo de la Cocacola hace lo que haga falta para que le asciendan y trasladen a Londres.  Otra obra maestra de Wilder, con un frenético ritmo y humor a tutiplén.  Le da un buen puntapié al comunismo, pero el capitalismo tampoco es que salga muy bien parado.  Se reparten hostias por todos lados.

Paris, Paris


Paris, Paris, de Christophe Barratier, con Gérard Jugnot.

Vida de la trouppe de un viejo teatro de variedades de barrio en la  Francia pre-ocupación nazi.  Musical que seguro que anunciaron así: “si le gustó Los Chicos del Coro, Ud. no se la puede perder”.  Historia sencilla y efectiva, disparando directamente al centro de la ñoñez.  Pero está hecha con cariño y elegancia, y se nota.

Sunshine Cleaning


Sunshine Cleaning, de Christine Jeffs, con Amy Adams y Emily Blunt.

Vuelta de tuerca a “la vida es bella”.  A pesar de todos los sinsabores que le da la vida, una madre soltera se esfuerza a diario para sacar adelante además a su padre y a su hermana.  Guión interesante y estupendas actuaciones.  Seguro que triunfó en Sundance.  Atención al niñato, que le hace sombra a Little Miss Sunshine (ups, qué coincidencia).

Vicky, Christina, Barcelona


Vicky, Christina, Barcelona, de Woody Allen, con Javier Bardem, Scarlett Johannson y Penélope Cruz.

Dos amigas ricas y americanas pasan un verano en Barcelona y experimentan con el amor y sus derivados.  Perfecta factura para otra insulso film de Mr. Allen.  La fotografía es estupenda, aunque chirría la música de guitarra flamenca en una ambientación del norte de España (estos americanos…) No me acaba de gustar esta manía de contar historias sobre gente que me importa un bledo, aunque la prefiero a Match Point.  El doblaje te mata el juego de los idiomas que se traen todo el tiempo.  Interesante.